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Hace una semana, las cámaras de seguridad de un restaurante en Guadalajara (Jalisco) captaron a un reconocido chef local, Miguel Álvarez, irrumpiendo violentamente en el establecimiento. Eran las 7:30 de la mañana y la discusión escaló rápidamente cuando Álvarez, visiblemente alterado, empezó a gritarle a un mesero por un supuesto mal servicio. El video, de tres minutos de duración, muestra al chef empujando una mesa y tirando varios platos al suelo mientras el personal del restaurante trata de calmar la situación.
El incidente se viralizó en redes sociales, generando indignación entre los ciudadanos y clientes habituales del restaurante, quienes repudiaron la actitud del chef. La administración del local presentó una denuncia formal ante la Fiscalía de Jalisco, lo que derivó en la apertura de una investigación por agresión y daños materiales. Este viernes, agentes de la policía estatal detuvieron a Álvarez en su domicilio para presentarlo ante las autoridades.
Lucía Ramírez (26 años), la mesera involucrada en el altercado, relató en una entrevista con este medio que el chef la amenazó con arruinar su carrera si hablaba del incidente. “Todavía tengo miedo, pero el apoyo de la gente me ha dado fuerzas para seguir adelante”, expresó Ramírez. La trabajadora también mencionó que no era la primera vez que Álvarez tenía una reacción violenta en un restaurante, ya que anteriormente había protagonizado episodios similares en otros establecimientos de la ciudad.
El chef, conocido por su participación en programas de cocina y su exitoso restaurante de alta gastronomía, ha mantenido un perfil bajo desde el incidente. En redes sociales, varios de sus seguidores han exigido una disculpa pública y han manifestado su descontento con su comportamiento. Empresas que anteriormente colaboraban con él han comenzado a deslindarse, y la gerencia de su restaurante emitió un comunicado en el que asegura que su conducta no representa los valores del negocio.
La Fiscalía de Jalisco ha confirmado que la investigación sigue en curso y que se evaluarán las pruebas presentadas por la parte afectada. Mientras tanto, la comunidad gastronómica ha mostrado su rechazo al comportamiento del chef, dejando en el aire el futuro de su carrera y reputación profesional.
