La noche del sábado fue una de las más memorables de Saturday Night Live gracias a la increíble actuación de Lady Gaga, quien no solo fue la anfitriona, sino también la artista musical invitada. Con una combinación de su talento para la comedia y su impresionante habilidad musical, la cantante desató el caos y la diversión en el escenario.
Durante los sketches, Gaga demostró una habilidad inesperada para la comedia, participando en escenas que dejaron a la audiencia riendo a carcajadas. Pero lo más destacado de la noche fueron sus presentaciones en vivo, en las que entregó interpretaciones electrizantes que mostraron su faceta más auténtica y poderosa.
Gaga no solo brilló en su faceta artística, sino que también cautivó con su presencia magnética, manteniendo a los espectadores al borde de sus asientos a lo largo de la noche. Fue un verdadero espectáculo donde la multifacética estrella dejó claro que no hay límites para su talento.
