En medio del conflicto con Rusia, Ucrania ha confirmado que está en conversaciones con Estados Unidos para redefinir un acuerdo sobre la explotación de sus minerales estratégicos. Según fuentes cercanas, esta nueva versión favorecería más a Washington en comparación con la que quedó pendiente tras la tensa reunión entre el presidente Volodímir Zelenski y Donald Trump el pasado 28 de febrero.
Paralelamente, las hostilidades entre Kiev y Moscú se intensifican. Ambos países se acusan de violar el alto el fuego en infraestructuras energéticas. Ucrania ha denunciado ataques a sus plantas de gas, mientras que Rusia señala a Ucrania como responsable de la destrucción de una estación de paso de gas en la provincia de Kursk.

En el ámbito político, Vladímir Putin ha sugerido la creación de un Gobierno “temporal” en Ucrania, supervisado por la ONU, EE. UU., Europa y aliados de Rusia, con el propósito de convocar elecciones y establecer un nuevo Ejecutivo con el cual negociar la paz. No obstante, el secretario general de la ONU, António Guterres, ha rechazado la propuesta, subrayando que el Gobierno de Zelenski es legítimo y debe ser respetado.
Con el conflicto lejos de resolverse, las negociaciones diplomáticas y los enfrentamientos en el terreno siguen marcando la actualidad de la guerra.