El primer ministro de Israel, Benjamín Netanyahu, advirtió este lunes que Israel continuará con su ofensiva contra el grupo Hezbolá en todo el territorio libanés. La declaración se produce después del ataque más mortífero del movimiento islamista contra Israel, que ha intensificado el conflicto entre ambas partes.
El conflicto, que ya cumple casi un año de enfrentamientos transfronterizos, escaló desde el 23 de septiembre, cuando el ejército israelí aumentó los bombardeos en el sur de Líbano y, una semana después, lanzó una ofensiva terrestre. La respuesta de Hezbolá llegó este domingo, con un bombardeo en una base de la brigada Golani en Binyamina, al norte de Israel, causando la muerte de cuatro soldados y dejando más de 60 heridos, según reportes de United Hatzalah.
Netanyahu, tras visitar la base atacada, aseguró que las operaciones militares no cesarán y que los ataques se extenderán a áreas clave como Beirut. “Atacaremos sin piedad a Hezbolá en todo el Líbano”, afirmó el mandatario israelí.