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Clara Brugada, al frente del Gobierno de la Ciudad de México, dio a conocer que se girará una circular a las dependencias capitalinas para que dejen de reproducir o utilizar canciones que hagan referencia directa a generadores de violencia. Este esfuerzo, explicó, se alinea con el plan nacional para reducir la glorificación del crimen en la música.
Además, hizo un llamado a la ciudadanía en general para evitar este tipo de contenidos en sus espacios. Brugada puntualizó que no se está atacando al género musical como tal, sino que se busca frenar la propagación de mensajes que puedan influir negativamente en los jóvenes.
La polémica también se encendió tras un incidente en el Palenque de Texcoco, donde el público reaccionó con violencia cuando el cantante Luis R. Conriquez, intérprete de corridos ligados al narcotráfico, anunció que no cantaría ese tipo de temas. Conriquez ha ganado fama por sus letras dedicadas a personajes como Joaquín “El Chapo” Guzmán.
Desde Palacio Nacional, Claudia Sheinbaum reiteró que no hay una prohibición generalizada: “No se trata de prohibir los corridos, lo que buscamos es que no se hagan letras que celebren la violencia”.
