
El Gran Premio de España vivirá un cambio histórico en 2026 con su traslado a Madrid. La capital española debutará en la máxima categoría del automovilismo el 6 de septiembre de ese año con un circuito urbano en la zona de Ifema, convirtiéndose en la nueva sede de la carrera tras años en Barcelona. Este ambicioso proyecto, aprobado recientemente por el Ayuntamiento, incluye la ampliación de los pabellones 1 y 2 del recinto ferial, que se transformarán en el ‘paddock’ y el área VIP del evento.
La incorporación de Madrid al calendario de la F1 llega en un momento clave, en plena transición hacia una nueva era del deporte con la implementación de regulaciones innovadoras. Además, su debut coincidirá con la última edición del GP de Países Bajos, lo que podría modificar la estructura de la temporada. Aunque el trazado madrileño será temporal y desmontable, se espera que su impacto en la ciudad sea significativo, tanto a nivel económico como en términos de infraestructura y movilidad.
El plan urbanístico asociado al circuito contempla la reorganización del espacio en Ifema, incluyendo la optimización de accesos, la reestructuración de zonas de aparcamiento y la ampliación de servicios para garantizar el éxito del evento. Además, se ha tenido que resolver el traslado de la vía pecuaria Vereda de los Leñeros, una cuestión que había generado conflictos administrativos y críticas por parte de algunos sectores.
A pesar de ciertas protestas vecinales y la oposición de algunos grupos políticos, las instituciones impulsoras del proyecto destacan su enorme potencial económico, con un impacto estimado de 450 millones de euros hasta 2035. Madrid aspira a convertirse en un nuevo referente dentro del calendario de la Fórmula 1, ofreciendo un espectáculo de primer nivel en el corazón de la ciudad y consolidándose como un destino clave para el automovilismo mundial.