By Por Kathya Contreras
Keir Starmer Asume como Nuevo Primer Ministro del Reino Unido
El Partido Laborista británico ha logrado una victoria histórica en las elecciones parlamentarias celebradas este jueves, obteniendo 412 escaños frente a los 121 del Partido Conservador. Este resultado marca la peor derrota en la historia moderna para los conservadores, también conocidos como los “tories”.
Con 326 escaños necesarios para una mayoría absoluta en el Parlamento británico, Keir Starmer, de 61 años, ha reemplazado al conservador Rishi Sunak como primer ministro. Starmer recibió el encargo de formar gobierno por parte del rey Carlos III y ha prometido un “reinicio” y una “renovación nacional” en su primer discurso como jefe de gobierno en el 10 de Downing Street.
Un Cambio de Liderazgo
Starmer, quien sucedió a Jeremy Corbyn como líder laborista en 2020, destacó la necesidad de volver a la política como servicio público, afirmando que su administración tratará a todos los británicos con respeto e igualdad. Su primer acto como primer ministro fue nombrar a Angela Rayner como viceprimera ministra y a Rachel Reeves como ministra de Finanzas, subrayando su compromiso con la inclusión y la equidad de género.
Reacciones y Resultados
Rishi Sunak, en su discurso de despedida, aceptó la responsabilidad por la derrota y reconoció la clara señal de cambio enviada por los votantes. Aunque orgulloso de sus logros en el cargo, Sunak admitió que no había cumplido con las expectativas de los ciudadanos, especialmente en temas como los impuestos y la inmigración.
Los resultados electorales reflejan un cambio significativo en el panorama político del Reino Unido. Los laboristas obtuvieron alrededor del 33,7% de los votos, mientras que los conservadores lograron aproximadamente el 23,7%, casi un 20% menos que en 2019. Los liberales demócratas también experimentaron un aumento notable, obteniendo 71 escaños, mientras que el SNP sufrió una caída dramática, pasando de 38 escaños en 2019 a solo 9 en esta ocasión.
Perspectivas Futuras
La victoria de Starmer llega en un momento crítico para el Reino Unido, que enfrenta desafíos económicos y sociales significativos. Con una inflación elevada y un sistema de salud pública bajo presión, los británicos han votado por un cambio de rumbo. El nuevo primer ministro ha prometido reconstruir la infraestructura del país y demostrar que la política puede ser una fuerza positiva.
