By En contraste, los San Diego Padres enfrentan desafíos significativos tras una temporada baja que no cumplió con las expectativas de fortalecimiento del equipo. A pesar de las altas aspiraciones, la franquicia no logró concretar movimientos clave que podrían haber elevado su competitividad en la próxima temporada.
Uno de los golpes más duros fue la pérdida en la puja por Roki Sasaki, quien finalmente firmó con los Dodgers. La incorporación de Sasaki habría sido un impulso significativo para la rotación de los Padres, que ahora deberá buscar alternativas para reforzar su cuerpo de lanzadores.
Además, la salida del jardinero Michael Conforto, quien optó por unirse a los Dodgers, deja un vacío en la alineación ofensiva de San Diego. Conforto fue una pieza clave en la ofensiva la temporada pasada, y su partida representa una pérdida sensible para el equipo.
Estos reveses en el mercado de agentes libres han generado inquietud entre la afición y los analistas, quienes cuestionan la capacidad de los Padres para competir en una división que se ha fortalecido considerablemente. La gerencia del equipo enfrenta ahora la presión de buscar soluciones que mitiguen las pérdidas y mantengan al equipo en la senda competitiva.
La temporada 2025 se perfila como un desafío para San Diego, que deberá superar las adversidades y demostrar resiliencia para mantenerse en la contienda. La afición espera que, a pesar de los contratiempos, el equipo pueda encontrar la fórmula para competir al más alto nivel.
