La agencia calificadora Moody’s rebajó este viernes la calificación crediticia soberana de Estados Unidos, al retirarle la nota “AAA” —la más alta posible— y situarla en “Aa1”.
En su análisis, Moody’s señaló que la decisión obedece al continuo deterioro fiscal del país, caracterizado por elevados déficits presupuestarios y un crecimiento sostenido de la deuda pública. Asimismo, destacó que los costos de intereses en EE.UU. son significativamente mayores en comparación con otras economías con calificaciones similares.

“La falta de acuerdos entre las sucesivas administraciones y el Congreso para implementar medidas que frenen los grandes déficits fiscales y el alza de los intereses ha debilitado el perfil crediticio del país”, subrayó la agencia en su comunicado.
Con este recorte, Estados Unidos pierde su calificación más alta en las tres principales agencias calificadoras del mundo. Standard & Poor’s ya la había rebajado en 2011, y Fitch Ratings hizo lo propio en 2023.
Pese a reconocer la solidez económica del país, Moody’s advirtió que la falta de consenso político para revertir estas tendencias fiscales representa un riesgo para la sostenibilidad de su deuda a largo plazo.