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Por Frida Rebollar.
En el marco del Encuentro Jurídico Universitario, el destacado jurista Luigi Ferrajoli analizó los riesgos de la reforma judicial en México, a la que calificó como un atentado contra la separación de poderes. Según Ferrajoli, la iniciativa, que contempla la elección de jueces mediante mecanismos políticos, podría convertir al Poder Judicial en un brazo del poder político, debilitando su capacidad para actuar como garantía de los derechos ciudadanos.
Ferrajoli detalló que, en los Estados de Derecho, ningún poder es absoluto, y la independencia judicial es esencial para mantener el equilibrio democrático. “Integrar el Poder Judicial al poder político significa eliminar cualquier tipo de control efectivo y pone en peligro la esencia misma de la democracia”, advirtió.
El académico expresó su esperanza de que la reforma no sea un intento deliberado de instaurar un sistema autoritario, sino más bien el resultado de una falta de comprensión de las instituciones. Sin embargo, enfatizó que sus implicaciones serían igualmente graves.
La magistrada Lilia Mónica López Benítez moderó la conferencia, destacando la relevancia de analizar esta reforma desde un enfoque académico. Posteriormente, interactuó con estudiantes de derecho, quienes plantearon preguntas relacionadas con los retos del sistema judicial en el país.
Ferrajoli concluyó haciendo un llamado a la comunidad académica y jurídica para liderar una “batalla cultural” en defensa del Estado de Derecho y advirtió que estos desafíos no son exclusivos de México, sino parte de una tendencia global que afecta a varias democracias occidentales.
