By Por María Carrillo
Hace 23 años, el 11 de septiembre de 2001, el mundo fue testigo de uno de los atentados terroristas más mortíferos en la historia de Estados Unidos. Un grupo de 19 terroristas de Al Qaeda secuestró cuatro aviones comerciales estadounidenses cargados de combustible, con la intención de atacar diversos puntos clave del país. Estos ataques resultaron en la muerte de 2,977 personas en Nueva York, Washington D.C., y Shanksville, Pensilvania.
Las Torres Gemelas del World Trade Center en Nueva York colapsaron tras el impacto de dos de los aviones, mientras que un tercer avión se estrelló contra el Pentágono. El cuarto avión, United Airlines vuelo 93, se precipitó en las afueras de Shanksville luego de que los pasajeros intentaran recuperar el control. Los eventos marcaron un antes y un después en la lucha global contra el terrorismo y redefinieron la política de seguridad de Estados Unidos.
Conmemoración y homenaje a las víctimas
En el 23º aniversario de los ataques, el presidente Joe Biden, la vicepresidenta Kamala Harris y el expresidente Donald Trump asistieron a diversas ceremonias para honrar a las víctimas. El secretario de Estado, Antony Blinken, también participó en la conmemoración oficial del “Día de los Patriotas 2024”. Durante su discurso, Blinken recordó que “los terroristas cobraron la vida de cerca de 3,000 personas e hirieron a más de 6,000 en el ataque más destructivo en tierras estadounidenses”.
El secretario de Estado rindió homenaje a los valientes socorristas que arriesgaron y sacrificaron sus vidas en los esfuerzos de rescate y subrayó la importancia de mantener la lucha contra el terrorismo. “La resiliencia del pueblo estadounidense sigue siendo una fuerza perdurable en nuestra misión de proteger nuestra nación y a nuestros aliados”, afirmó Blinken.
La lucha continua contra el terrorismo
Desde los ataques del 11-S, Estados Unidos ha reforzado sus medidas de seguridad y ha mantenido su compromiso de defender su territorio y su población. Blinken enfatizó que el país sigue firme en su lucha contra las amenazas terroristas globales, en colaboración con sus aliados internacionales.
Este aniversario nos recuerda no solo el impacto devastador de los ataques, sino también la capacidad del pueblo estadounidense para unirse en tiempos de crisis y salir adelante con fortaleza y determinación.
