Por Frida Rebollar
Una final de fútbol en Guinea terminó en tragedia, dejando al menos 56 fallecidos y varios heridos en la ciudad de Nzérékoré, según el informe preliminar presentado por el Gobierno este lunes. La tragedia ocurrió el domingo, cuando los equipos locales de Nzérékoré y Labé se enfrentaban en un partido decisivo.
En un comunicado transmitido por la radiotelevisión pública RTG, las autoridades explicaron que los disturbios comenzaron tras una polémica decisión arbitral. La frustración de los aficionados llevó al lanzamiento de piedras, desencadenando estampidas que resultaron fatales.
El general Mamadi Doumbouya, presidente de transición, confirmó los hechos y envió sus condolencias a los afectados. También anunció la creación de una comisión de investigación para determinar las causas del desastre. “El Gobierno está trabajando desde ayer para ofrecer las primeras respuestas a este trágico suceso”, señaló.
La prensa local informó que la policía utilizó gases lacrimógenos cuando los hinchas de Labé, enojados por las decisiones del árbitro, invadieron el campo, aumentando el caos. El primer ministro, Mamadou Oury Bah, evitó precisar cifras, pero pidió calma a la población y aseguró que se están tomando medidas para atender la situación.