By Por María Carrillo
La migraña, una de las afecciones neurológicas más comunes a nivel mundial, afecta a más de mil millones de personas, causando dolor de cabeza recurrente acompañado de síntomas como vómitos, mareo y sensibilidad extrema a la luz y el sonido. De hecho, en 2019, la migraña fue la segunda causa principal de discapacidad en el mundo, y la primera entre las mujeres jóvenes.
Aunque existen nuevos tratamientos que permiten manejar mejor esta dolencia, alrededor del 40% de los pacientes no están satisfechos con sus opciones actuales. La clave para un tratamiento efectivo podría estar en identificar los síntomas prodrómicos, señales tempranas que anuncian la llegada de una migraña, como el hambre, los bostezos o el cansancio.
Un avance en el tratamiento: Ubrogepante
Un estudio publicado en la revista Neurology ha explorado la eficacia del ubrogepante, un fármaco que bloquea el CGRP (péptido relacionado con el gen de la calcitonina), una sustancia liberada en exceso durante las migrañas. El estudio, que incluyó a 477 pacientes, mostró que quienes tomaron ubrogepante al identificar síntomas iniciales de migraña, experimentaron una mejora significativa en su capacidad para llevar una vida normal. Comparado con un placebo, los pacientes que tomaron ubrogepante tuvieron un 66% más de probabilidades de mantenerse funcionales durante las 24 horas posteriores y más del doble de probabilidades de sentirse satisfechos con el tratamiento.
Importancia de reconocer los síntomas prodrómicos
Los síntomas prodrómicos, como el hambre, el cansancio y los bostezos, pueden aparecer hasta 48 horas antes del dolor. Según la doctora Patricia Pozo-Rosich, especialista en cefaleas del Hospital Universitario Vall d’Hebron de Barcelona, reconocer estos síntomas puede ser crucial para prevenir un ataque de migraña. Sin embargo, solo un tercio de los pacientes identifica con precisión estos síntomas, aunque con una correcta orientación, se puede llegar a un 80%.
Innovación en la detección temprana
Para mejorar la identificación de estos síntomas, se están desarrollando tecnologías avanzadas, como una pulsera que mide la sudoración y la frecuencia cardíaca, utilizando machine learning para predecir con mayor precisión la llegada de un ataque de migraña.
Conclusión
Los avances en el tratamiento de la migraña, como el ubrogepante, ofrecen esperanza para millones de personas. No obstante, su acceso sigue siendo limitado debido a su alto costo. En un mundo ideal, estos medicamentos estarían al alcance de todos, permitiendo un tratamiento más eficaz y una mejor calidad de vida para quienes sufren de migrañas.
