El Congreso de la Ciudad de México ha dado luz verde a una reforma constitucional que establece un tope al incremento de rentas en la capital, con 57 votos a favor y ninguno en contra.
La reforma, que modifica el Código Civil y la Ley de Vivienda, determina que el aumento de la renta no podrá superar la inflación reportada por el Banco de México durante el año anterior, en relación con la renta mensual acordada. Previamente, el límite máximo para el incremento de la renta era del 10%.
Además, se implementará un registro digital de contratos de arrendamiento, el cual será administrado por el Gobierno de la Ciudad de México. Los arrendadores tendrán un plazo de 30 días para registrar sus contratos una vez celebrados.
La reforma también busca garantizar el acceso a la vivienda, estableciendo mecanismos que beneficien a sectores vulnerables como trabajadores, madres solteras y jóvenes de entre 18 y 35 años, priorizando a quienes se encuentran en situación de pobreza.