El martes por la noche, elementos de la Secretaría de la Defensa Nacional (Sedena) abrieron fuego contra dos camionetas que transportaban a 33 migrantes en la carretera Villa Comaltitlán-Huixtla, en Chiapas. Como resultado del ataque, siete migrantes murieron y 12 más resultaron heridos. Según un comunicado oficial, el Ejército realizaba un reconocimiento terrestre cuando detectó un vehículo que evadió a las autoridades, lo que llevó a los militares a disparar. De acuerdo con la Sedena, los militares escucharon detonaciones y reaccionaron, lo que provocó que una de las camionetas se detuviera.
Los migrantes involucrados son de diversas nacionalidades, incluyendo egipcia, cubana, nepalí, pakistaní y árabe. Las autoridades informaron que cuatro personas murieron en el lugar del incidente y dos más fallecieron en el Hospital General de Huixtla. Los migrantes heridos fueron trasladados a hospitales cercanos, y los 17 que resultaron ilesos fueron puestos a disposición del Instituto Nacional de Migración (INM). La Secretaría de Relaciones Exteriores se encargará de contactar a las embajadas correspondientes para notificar sobre las víctimas.
La Fiscalía General de la República (FGR) ya ha sido informada de los hechos y será la encargada de llevar a cabo las investigaciones. Mientras tanto, los dos militares que accionaron sus armas han sido retirados de sus funciones, y la Fiscalía General de Justicia Militar también llevará a cabo una investigación paralela en torno a la conducta de los soldados.
Estos hechos ocurrieron el mismo día que Claudia Sheinbaum asumió el cargo de Presidenta de México. En su discurso de toma de posesión, Sheinbaum aseguró que en México no existen violaciones a los derechos humanos ni un Estado de excepción, haciendo énfasis en que la Guardia Nacional sigue siendo parte de la Sedena sin que esto implique una militarización del país.
Por otro lado, la investigación periodística del libro Permiso para Matar, de Paris Martínez y Daniel Moreno, sostiene que desde hace 17 años en México se comete un crimen de Estado cada cinco días. El libro documenta los abusos y crímenes perpetrados por fuerzas de seguridad en México durante los últimos tres sexenios, subrayando que la militarización ha aumentado la vulnerabilidad de la población en lugar de protegerla.