En noviembre de 2020, Rhoen, un perro conocido por su destreza en pruebas de agilidad, enfrentó un diagnóstico de enfermedad pulmonar que puso en pausa su carrera. Tras viajar junto a su dueña, Liz Randall, a la Clínica BREATHE en la Universidad de Missouri, el can recibió diagnósticos avanzados y cirugías que salvaron su vida.
A pesar de los pronósticos, Rhoen volvió a competir en eventos de alto nivel, ganando el prestigioso UKI Agility en 2022. Su recuperación, impulsada por su tenacidad y los cuidados excepcionales de los veterinarios, es un testimonio de lo que la medicina moderna y el amor por los animales pueden lograr.
Con seis años, Rhoen continúa desafiando las probabilidades, inspirando a dueños de mascotas y aficionados al deporte canino con su historia de resiliencia y éxito.